Tengo una amiga de hace muchos años a quién admiró mucho, ella vivía con su mamá y hermanos y con el salario de ella se mantenían los gastos generados por todos. Ella muy joven tuvo la gran responsabilidad de velar por su mamá, hermanos y economía general del hogar. Y lo peor es que su vida social quedaba rezagada por las múltiples obligaciones que tenía sobre sus hombros.
Constantemente me asombraba de la buena actitud que ella tenía hacia la vida y hacia las tempestades que azotaban su vida. Tuvo un noviazgo de 8 años el cual no logró llegar a buen término, casi no salía pues era muy hogareña y quería ayudar a su mamá con los quehaceres del hogar. Bueno realmente es admirable la actitud de ella, no podía creer que a pesar que no tenía un empleo fijo y le pagaban muy poco en el que estaba y bueno su situación financiera que no era buena, ella siempre tenía una sonrisa en su rostro y agradecía a Dios por todo lo que tenía.
Yo honestamente, pensé que nunca se iba a casar pues los años pasaban y ella seguía sola y por lo general no salía a ningún lado, pero los caminos de Dios son extraños y El tenía un propósito en la vida de mi amiga.
Hoy ella está felizmente casada, esperando su primer hijo, con casa propia y un muy buen empleo. Creo que la actitud que ella tuvo durante sus años de tormenta es la llave para quiénes estamos o hemos pasado por "crisis".
De acuerdo con la Real Academia Española crisis se define como: "Momento decisivo de un negocio grave y de consecuencias importantes; Situación dificultosa o complicada".
Hasta la fecha no he conocido ninguna persona que no haya pasado por un momento de crisis: desempleo, rompimiento de una relación, la muerte de un ser querido, carencias económicas, enfermedad, en fin, la crisis pueden desarrollarse de diferentes formas y tener muchos nombres, pero todas ellas tienen características comunes tales como:
Es inesperada: No sabemos cuando va a llegar
Produce incertidumbre: Al no saber cómo o cuándo vamos a salir de ella
Afecta nuestro estado emocional: Produce tristeza, ansiedad, depresión entre otros sentimientos.
El asunto es cómo enfrentarlas, cómo salir airoso de estos episodios inesperados. Bueno recientemente tocamos este tema en un programa de opinión radiofónica con un experto en psicología, él planteo que la actitud era clave para afrontar este tipo de
situaciones y en verdad apoyo esta teoría, pues mi amiga, tuvo una buena actitud para
afrontar todas las situaciones que se le presentaban.
No obstante, considero que además de actitud debe existir un entorno rodeado de personas que nos den su apoyo y hombro para llorar si es necesario. En tiempos de crisis lo peor que puedes hacer es quedarte solo pues eso incrementará la depresión y por ende el sentimiento de soledad y luto.
Lo primero es desahogarse, llorar, gritar si es necesario. Luego tranquilizarse y tratar de meditar en la situación que estamos viviendo y tratar de buscar una manera de poder aprender de ella y salir adelante. No es una tarea fácil, pues como dije anteriormente las crisis vienen en el momento que menos imaginamos y nos hacen caer en un abismo muy profundo. Pero recuerda que cuando más oscura está la noche es cuando el sol está por salir.
En la vida no entendemos muchas de las situaciones que pasan, pero puedes tener la seguridad que de todo sale una lección y algo bueno. La ventaja de la crisis es que es pasajera, pasa, por lo tanto solo debemos ser fuertes y aguantar hasta que pase y luego meditar sobre lo ocurrido a fin de aprender de ello para no volver a pasar por ahí otra vez.
Constantemente me asombraba de la buena actitud que ella tenía hacia la vida y hacia las tempestades que azotaban su vida. Tuvo un noviazgo de 8 años el cual no logró llegar a buen término, casi no salía pues era muy hogareña y quería ayudar a su mamá con los quehaceres del hogar. Bueno realmente es admirable la actitud de ella, no podía creer que a pesar que no tenía un empleo fijo y le pagaban muy poco en el que estaba y bueno su situación financiera que no era buena, ella siempre tenía una sonrisa en su rostro y agradecía a Dios por todo lo que tenía.
Yo honestamente, pensé que nunca se iba a casar pues los años pasaban y ella seguía sola y por lo general no salía a ningún lado, pero los caminos de Dios son extraños y El tenía un propósito en la vida de mi amiga.
Hoy ella está felizmente casada, esperando su primer hijo, con casa propia y un muy buen empleo. Creo que la actitud que ella tuvo durante sus años de tormenta es la llave para quiénes estamos o hemos pasado por "crisis".
De acuerdo con la Real Academia Española crisis se define como: "Momento decisivo de un negocio grave y de consecuencias importantes; Situación dificultosa o complicada".
Hasta la fecha no he conocido ninguna persona que no haya pasado por un momento de crisis: desempleo, rompimiento de una relación, la muerte de un ser querido, carencias económicas, enfermedad, en fin, la crisis pueden desarrollarse de diferentes formas y tener muchos nombres, pero todas ellas tienen características comunes tales como:
Es inesperada: No sabemos cuando va a llegar
Produce incertidumbre: Al no saber cómo o cuándo vamos a salir de ella
Afecta nuestro estado emocional: Produce tristeza, ansiedad, depresión entre otros sentimientos.
El asunto es cómo enfrentarlas, cómo salir airoso de estos episodios inesperados. Bueno recientemente tocamos este tema en un programa de opinión radiofónica con un experto en psicología, él planteo que la actitud era clave para afrontar este tipo de
situaciones y en verdad apoyo esta teoría, pues mi amiga, tuvo una buena actitud para
afrontar todas las situaciones que se le presentaban.
No obstante, considero que además de actitud debe existir un entorno rodeado de personas que nos den su apoyo y hombro para llorar si es necesario. En tiempos de crisis lo peor que puedes hacer es quedarte solo pues eso incrementará la depresión y por ende el sentimiento de soledad y luto.
Lo primero es desahogarse, llorar, gritar si es necesario. Luego tranquilizarse y tratar de meditar en la situación que estamos viviendo y tratar de buscar una manera de poder aprender de ella y salir adelante. No es una tarea fácil, pues como dije anteriormente las crisis vienen en el momento que menos imaginamos y nos hacen caer en un abismo muy profundo. Pero recuerda que cuando más oscura está la noche es cuando el sol está por salir.
En la vida no entendemos muchas de las situaciones que pasan, pero puedes tener la seguridad que de todo sale una lección y algo bueno. La ventaja de la crisis es que es pasajera, pasa, por lo tanto solo debemos ser fuertes y aguantar hasta que pase y luego meditar sobre lo ocurrido a fin de aprender de ello para no volver a pasar por ahí otra vez.
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